lunes, febrero 01, 2021

TIEMPOS EXTRAÑOS

Está de moda lo eléctrico, no eres moderno si no tienes un coche eléctrico, un patinete o una bici, ahora todo tiene que ir con luz y ser gestionado por una cosa que los técnicos llaman inteligencia artificial y llevando como apellido la palabra inteligente.


Los teléfonos deben de ser inteligentes, aunque se inventaran para hablar, deben saber hacer más cosas, de lo contrario se les considera anticuados.


Las televisiones deben ser inteligentes para ofrecerte aquello que se ajusta a tus gustos.


Las neveras deben ser inteligentes para detectar cuando te queda poco queso en el interior y pasar la nota al supermercado con todo lo que te hace falta.


Hubo un tiempo en que la inteligencia era cosa de los humanos, ahora ya no…


Hasta los vehículos ya son capaces de hacer recorridos largos de forma autónoma.


En un futuro no muy lejano, los humanos serán sustituidos por máquinas, que no se ponen enfermas, no tienen vacaciones, no hacen pausas y cuando se estropean se cambian por otra nueva.


Una máquina será capaz de remplazar al hombre, mientras tanto seguimos coleccionando cacharritos eléctricos para alegría de la compañía suministradora.


Hasta los más perezosos quieren una bici eléctrica para que les ayude a subir las cuestas.


Por el momento las máquinas no nos controlan del todo, pero me temo que solo es cuestión de tiempo.


El hombre quedará relegado a un segundo plano, quizás criador de pájaros o masajista.


Los robots empiezan a coparlo todo, mientras todo el mundo sueña con su coche eléctrico y autónomo, su nevera capaz de llamar al supermercado y pasar la nota.


No eres moderno, si no estás a favor de que las máquinas copen tu vida, pronto pasaremos a ser unos consumidores pasivos de lo que nos ofrezca nuestra tele inteligente.


No veo un robot cavando zanjas, ni levantando paredes de una casa, pero me temo que pueden sustituirnos con la programación adecuada.


miércoles, enero 06, 2021

PROPOSITOS Y CALENDARIOS

 

Ha llegado enero del nuevo año y con él los nuevos propósitos que acabaran en la papelera al cuarto mes y es que la vida es más complicada de lo que los libros de autoayuda nos empeñan en hacer ver, la vida siempre tiene imprevistos, sorpresas no gratas en el calendario, ese invento humano que sirve para ver como te haces viejo irremisiblemente.


Normalmente, aquello que se empieza con mucha ilusión, pero requiere disciplina y constancia, suele abandonarse rápido, por eso se venden libros de esos que te dan soluciones mágicas en menos de treinta días.


Vivimos en una sociedad donde todo ha de ser rápido, inmediato e indoloro.


Vivimos en una sociedad donde se arrincona al que molesta, ya sea un viejo o un enfermo.


Todo tiene que ser perfecto, rápido y maravilloso, de lo contrario es desechado por complicado y costoso.


Todo tiene que ser rentable al máximo y a gran velocidad.


La paciencia y la tenacidad están en declive, al igual que lo está la empatía.


Así es la sociedad moderna, veloz y con el calendario marcando el ritmo.

martes, diciembre 01, 2020

NAVIDADES A PARTE

Este año no habrá celebraciones navideñas, ni los ánimos, ni la economía están para dispendios extraordinarios, salvo que seas un político profesional, en cuyo caso tu cartera no se resentirá lo más mínimo, vivir del presupuesto público tiene sus ventajas grandes privilegios, como guardaespaldas para evitar pesados y descontentos, secretaria para no tener que usar la memoria.


Asesor para no pecar de indocumentado y asistente de imagen para no ir hecho un pelagatos por el mundo.


Además de cobrar grandes sueldos, dietas y pluses por asistencia.


No es de extrañar que levantes una piedra y aparezcan miles de aspirantes a vivir bien trabajando lo justo y teniendo más derechos que un empleado de la empresa privada y cobrando la pensión más elevada cuando llega el retiro.

Los despachos con moqueta son muy atractivos, tanto como ir en coche oficial de cristales tintados a restaurantes de cien euros la media por cubierto.

Vivir del presupuesto público es muy tentador cuando no tienes que dar explicaciones más que al jefe del partido.

Ya se sabe que los partidos son lo más parecido a una secta donde si se quiere progresar se debe tener una fe inquebrantable en el líder.

Tengo la ventaja de que no me querrían en ningún partido, las personas con carácter suelen durar minutos en ese tipo de organizaciones donde se premia la sumisión, la obediencia y no pensar asumiendo como irrefutables los postulados del partido.

Los políticos son los únicos que viven bien en las situaciones de crisis como la actual.

Ellos, sí, tendrán una hermosa Navidad con casi dos meses de descanso.

El resto de mortales estamos en otra división inferior peleando por llegar a final de mes.

domingo, noviembre 01, 2020

LA SELVA

 Internet es una selva a la que cada día le profeso mayor aversión, por la cantidad embaucadores profesionales que la pueblan a la caza de incautos, estafadores de todo tipo, sexo y condición, gente dispuesta a traficar con tus datos a cambio de dinero.



Ese comercio de datos es el que luego hace que tu teléfono suene con todo tipo de vendedores al acecho como buitres a la caza de carne fresca.


Nunca entenderé a ese tipo de personas que durante este año se han dedicado a retransmitir su vida y colocar algo tan personal como las ecografías de su futuro retoño.


Comprendo que haya gente que promocione sus cursos, sus negocios siempre que sean lícitos en la red a la búsqueda de clientes potenciales.


Lo que nunca entenderé que no se persiga es la venta de medicamentos sin receta, armas e incluso haya quien te ofrezca la posibilidad sin ningún recato de blanquear dinero o de un matrimonio amañado a cambio de la nacionalidad de un determinado país.


No entiendo que ese tipo de conductas poco decorosas y éticas no se persigan e incluso proliferen cada día más los negocios piramidales que prometen rentabilidades imposibles.


Uno hace años que en la red busca libros y formación, es una obsesión sana mucho más que esquivar timadores y vende humos.


Hay que tener cuidado, nadie abriría su casa a un desconocido a día de hoy, quizás hace veinte años sí, pero las cosas han cambiado a peor tienes que desconfiar hasta de tu sombra para sentirte seguro.

viernes, octubre 23, 2020

HUIR


En épocas difíciles lo mejor es refugiarse en los libros, huir de las redes sociales y la crispación.



Escuchar buena música, apagar la radio y la televisión, abandonar la lectura de los periódicos que últimamente parecen fotocopias unos de otros ahorrando ese dinero para comprar novelas del agrado de uno y mantener la mente alejada de un ambiente tenso, crispado, estomagante y propenso a la pesadumbre.

Resulta curioso que los ingenieros que tanto empeño ponen en que estemos permanentemente conectados mediante

sábado, enero 04, 2020

RENGLONES

Con mucho esfuerzo conseguí leerme los cien libros al año que me había propuesto, me alegra ver que mis gustos son variados y que las editoriales tienen en mí un gran cliente que todos los meses compra algún libro en formato digital legal.
Más barato que en papel y que según tengo entendido durante quince años podré leer todas las veces que quiera.
Lo curioso es que un país donde se lee poco, des una patada y salgan una decena de escritores cuyo público suele ser mayoritariamente joven y femenino, a excepción del ratón de biblioteca que está perpetrando este desahogo personal sin ninguna pretensión.
Es bonito ir descubriendo que los gustos evolucionan con el tiempo y que vas siendo más selectivo, aunque he de reconocer que abandonar un libro me crea un gran complejo de culpa, por lo que rara vez dejo un libro sin acabar es un extraño código que me impongo.
Si empiezas algo intenta acabarlo

lunes, febrero 11, 2019

MI REFUGIO

Con veinte años descubrí que el único país que me llamaba la atención era Italia, por aquel entonces le pedí a mi abuelo que me comprara un diccionario de italiano.


Poco a poco y de un modo un tanto autodidacta me fui introduciendo en ese país, me interesé por su música que aquí no es demasiado conocida, su gastronomía, sus costumbres.



Aunque mi italiano está en proceso de mejora, la escritura me resulta algo más costosa de lo esperado.



Sigo soñando con visitarlo algún día, quizás cuando mi estado físico sea algo mejor.



Por el momento sigo investigando sobre el país, incluso en un momento de zozobra personal, averigüe los pasos a seguir para lograr la nacionalidad italiana, que todo sea dicho de paso es muy difícil de lograr cuando no se tienen ancestros italianos.



Desconozco si algún día lo visitaré, pero me marque como reto poder mantener una conversación en italiano y poder leer en esa lengua y ese es mi objetivo.



Es uno de esos pequeños deseos que está en mi mano cumplir y a él aspiro.



Me entretengo oyendo la radio italiana, así seguro que acabo entendiendo el idioma y mejorando mi pronunciación.



Si tuviera que exiliarme Italia sería quizás un buen refugio.

EL TEXTO DESTACADO

VESTIDOS

 El vestuario ha experimentado una fascinante evolución desde 1900 hasta nuestros días. A principios del siglo XX, la moda estaba dominada p...